¿Cómo tratar la ansiedad y depresión durante el confinamiento?

El inicio de esta década nos ha tomado por sorpresa. Día con día, los noticieros parecieran traernos una noticia peor que la anterior. Ello puede significar en múltiples casos que el alto grado de incertidumbre provoca ansiedad, estrés, depresión e intranquilidad. Sin embargo, a pesar de todo y con todo, ¡te ayudamos a que lo superes y mantengas el control! A continuación, cinco recomendaciones esenciales para tratar la ansiedad y la depresión durante la cuarentena.

 

Saldremos del coronavirus, mientras tanto haz lo siguiente

 

Organízate

Creemos que está de más decir que el aislamiento no es lo mismo que vacaciones. Debes mantenerte activo y constante. ¿Home office? Levántate a la misma hora de siempre y concentra el tiempo de trabajo de la misma forma que lo harías en la oficina. Busca un espacio cómodo y cronograma tus actividades. ¿Escuela en línea? Hazte un horario y dale suficiente tempo a todas tus tareas y compromisos. Pon un despertador y alarmas. Haz una rutina. Aprovecha la libertad de internet para aprender más, no para distraerte. No te atiborres demasiado, mejor sigue el segundo consejo.

 

Relájate y descansa

Sabemos que el mundo parece caerse a pedazos y eso es inquietante; sin embargo, es bueno hacer pausa y simplemente dejar de pensar en el coronavirus. Toma un momento para calmarte y simplemente recuperar tu tranquilidad. Para ello, te recomendamos dejar el celular un rato, apagar la TV y alejarte de tu computadora. Intenta leer ese libro que nunca terminaste, arma el rompecabezas empolvado que tienes arrumbado, haz un curso en línea de algo que siempre quisiste aprender o simplemente toma una siesta. ¡Hay un mundo de posibilidades!

 

Mantente en contacto

La tecnología es maravillosa y no deja de sorprendernos. La cuarentena nos aleja físicamente de amigos y familiares que apreciamos y con los que estamos acostumbrados a convivir. Las aplicaciones de videollamada son una excelente opción para compartir una buena charla sin sentirnos lejanos. Si no es posible, las llamadas telefónicas e incluso unas conversaciones vía mensaje son perfectos aliados. Aprovecha el tiempo, cuéntales a tus amigos qué te preocupa, cómo te sientes y… ¡presúmeles las nuevas actividades que ya realizas! Ten la seguridad de que eso los inspirará a ellos.

Cuida tu cuerpo

Toma mucha agua y come saludable, con tiempos bien definidos. Tal vez el aislamiento sea una buena excusa para empezar una dieta más rigurosa. ¡Consulta a tu nutriólogo! Los gimnasios están cerrados y pocas personas tienen aparatos de ejercicio en casa; sin embargo, hay un sinfín de material en internet para poder ejercitarte desde casa y con lo que tienes al alcance. El ejercicio es una excelente forma de quitar el estrés y un apoyo que tu cuerpo definitivamente agradecerá.

 

Considérate

Los consejos anteriores son pasos sencillos, que pueden cambiar tu panorama; sin embargo, no son recomendaciones clínicas. Este aislamiento mundial es algo que está absolutamente fuera de nuestras manos y enfrentamos un caso nunca antes visto. La realidad es abrumadora y cada caso es distinto. Lo más recomendable es tener la opinión profesional de un especialista, quien pueda dar un diagnóstico y ansiedad tratamiento conforme a tu particular situación de ansiedad.

 

Consejo extra: Filtra la información

El entorno es suficientemente apabullante, no necesitamos más. Mantenerse informado es importante, por supuesto; sin embargo, es primordial saber que la información que tenemos al alcance es objetiva y veraz. Las notas amarillistas, las cadenas y muchas publicaciones de redes sociales tienden a ser falsas. No esparzas rumores, encuentra fuentes confiables, provenientes de expertos en salud y las autoridades competentes.

Recuerda que las fuentes oficiales están actualizadas al momento y dan certeza de en qué punto estamos. Creemos que podremos salir de esta. Mientras tanto, alcancemos paz.

 

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Todo lo que necesitas saber sobre la depresión, el enemigo silencioso

Millones de personas alrededor del mundo hoy viven con depresión. Las enfermedades psiquiátricas o mentales son una alteración en las facultades perceptivas y de raciocinio. Disminuyen en la gente la capacidad para relacionarse con los demás.

Entre sus manifestaciones comunes, están algunos trastornos como el del sueño, el del apetito y los cambios de humor. También se suman a estos los sentimientos de aislamiento, angustia, baja autoestima y tristeza. Además, se pueden agregar problemas de concentración y de memoria y hasta sentimientos e ideas suicidas.

Síntomas de depresión y sus posibles causas

Conocer las causas puede ayudarnos a saber qué tipo de apoyo buscar. Las más comunes son:

Factores biológicos: algunos elementos genéticos pueden afectar a nuestras funciones cerebrales.

Abuso de sustancias: consumir sustancias controladas o exceder en el uso de medicamentos durante algún tiempo puede provocar este trastorno.

Estrés: someterse a una tensión excesiva (ya sea laboral, familiar o de otra cualquier índole) es muy dañino para nuestro cuerpo y nuestra mente.

Por los síntomas que se manifiestan, se puede diagnosticar una depresión como parte de un trastorno. Algunos de estos pueden ser:

Trastorno bipolar: se experimentan emociones extremas por largo tiempo, que van desde manía (intensa) hasta bajones (melancolía).

La distimia: se trata de periodos intermitentes en los cuales la persona sufre depresión grave y esto llega a interferir en su vida cotidiana.

Depresión posparto: es una debilidad del sistema emocional cuyo nivel de intensidad varía de leve a un tanto agresivo.

 Trastorno afectivo estacional: en lugares donde hay poca luz solar en ciertos meses del año, algunas personas sufren este trastorno. La depresión se intensifica entre otoño e invierno, para luego desaparecer entre primavera y verano. Los síntomas pueden variar desde tener pensamientos negativos hasta lapsos de euforia. En casos extremos algunos llegan a pensar que no vale la pena vivir.

 

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Cómo puedes tratar y sobrellevar la depresión

Es de suma importancia que busques un profesional competente en el área de salud mental para recibir el diagnóstico adecuado. Y es vital aceptar que tienes el trastorno y acatar el medicamento sugerido para obtener mejores resultados.

 

Cómo puedes tratar y sobrellevar la depresión

 

Otras ayudas prácticas son:

Lleva una vida equilibrada: evita los excesos y limita el consumo de sustancias que afecten a tu sistema nervioso como el alcohol y las drogas.

Duerme suficiente: es bueno dormir al menos de seis a ocho horas diarias. Procura hacerlo y te beneficiarás. Se recomienda ser disciplinado en la hora de dormir; se ha comprobado que el lapso entre las diez de la noche y las dos de la mañana es cuando el cuerpo se recupera mejor, tanto física como mentalmente.

Mantén una dieta balanceada: comer saludable evitará enfermedades y cambios drásticos en tu nivel hormonal. Un nutrólogo puede darte recomendaciones sobre los alimentos que favorecen un estado de ánimo adecuado.

No consumas medicamentos sin prescripción médica: cuidar no consumir medicamentos controlados innecesariamente puede prevenir el descontrol emocional.

No te aísles de los demás: evita que tus pensamientos y situaciones negativas ahoguen tu juicio. Busca maneras de ayudar a otros, eso contrarrestará los sentimientos de inutilidad.

Encuentra actividades que te relajen: actividades provechosas de ocio mantendrán tu cerebro ocupado en cosas positivas y te ayudarán a debilitar la depresión. También  será bueno llevar una rutina de ejercicios físicos acordes a tu edad.

Gracias a los avances de la medicina, las personas con desánimo crónico pueden recibir un tratamiento adecuado y, con la ayuda de un buen médico especialista, obtener un diagnóstico claro y preciso.

Aunque en la mayoría de casos la depresión se presenta por causas identificables, a menudo se cuela en nuestras vidas sin previo aviso. Por ello, es importante que vigiles tu estado emocional constantemente, pues así podrás combatir ese enemigo silencioso.

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