El desarrollo de las habilidades sociales y cognitivas de los niños varían considerablemente entre ellos, pero a una que debes poner especial interés es al retraso del lenguaje porque de este dependerá la integración de tu hijo o su aislamiento.
Todos los niños crecen y se desarrollan a diferente velocidad con base a su herencia genética y al medio ambiente, así sea el primogénito, el “sándwich” o el último, si es niña o varón o hasta si mamá es parlanchina o reservada.
Sin embargo, los expertos han establecido una serie de comportamientos y habilidades que engloban a la mayoría de los menores y pueden ayudarte a identificar si existe un atraso en el lenguaje del niño.
10 Señales que pueden ayudarte
De los 7 a los 12 meses, el niño descubre que los sonidos son poderosos para llamar la atención y comienza a sentirse parte del grupo familiar. Pon atención si:
1. Hace pocos sonidos y no dice “mamá” o “papá”.
2. No reacciona al escuchar su nombre y no se despide con su manita.
De los 12 a los 18 meses han aumentado sus habilidades motoras y de lenguaje, consulta con su pediatra si:
3. Solo dice algunas palabras, prefiriendo usar gestos.
De 18 a los 2 años. Un período lleno de retos para los padres y de descubrimiento para los chiquillos; vigila su desarrollo si:
4. No forma oraciones y su vocabulario es menor a 50 palabras
5. No señala sus partes del cuerpo
6. No es capaz de seguir instrucciones sencillas.
De los 2 a 3 años tu niño es más independiente, su grupo social ha crecido y la interacción con la familia también. Observa a tu hijo en los aspectos siguientes y considera una consulta si:
7. Tiene problemas para integrarse en el juego con otros niños, no tiene interés en los libros ni en colorear
8. No responde afirmando ni preguntando, tampoco usa frases con sustantivo y un verbo.
9. No pide las cosas por su nombre.
A los 4 años ya es un escolar y su universo se ha ampliado considerablemente, su curiosidad no tiene fin. Acompáñalo por el mundo de fantasía que se despliega ante él y apoya a tu pequeño si:
10. Los adultos no lo entienden porque pronuncia letras o usa palabras de manera incorrecta. En ocasiones, presenta tartamudeo.
Disfruta con él
A pesar de que la asesoría y evaluación de un experto en la salud es lo recomendable, la familia puede ayudar a prevenir o aminorar los atrasos leves que pudieran presentarse.
- Escucha con atención a tu hijo y responde sencilla y claramente.
- Canta y baila con tu niño.
- Comparte sus juegos y platica con él mientras lo hacen.
- Lean cuentos e inventen historias; incluye sonidos en la narración.
- Relata tu día y pídele que te cuente el suyo sin presiones.
- Utiliza muchas palabras distintas y emplea frases cada vez más largas.
- Fomenta la interacción con otros niños de su edad.
- El tartamudeo puede ser solo una etapa, presta atención a otras señales o consulta a un especialista.
- A veces el retraso verbal es consecuencia de problemas auditivos, en este caso tu pediatra te recomendará las pruebas necesarias para evaluar esta situación.
- Aunque te parezca drástico, no “le adivines” en todas las situaciones, estimula su expresión.
Independientemente de la edad del niño, enfócate en la comunicación, platica con él, estimula la imitación de gestos y sonidos, lee historias y cántale. Solo evita copiar el habla infantil.
Identificar y ocuparse de un posible retraso en el lenguaje lo antes posible es la mejor ayuda que puedes proporcionar a tu pequeño. Con la asesoría adecuada, muy pronto tu hijo se comunicará “a las mil maravillas” contigo y el mundo.
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