Los efectos secundarios de la parálisis facial se presentan con frecuencia entre un veinticinco a sesenta y cinco de los casos directamente en la zona afectada. En otras palabras, las tres cuartas partes de los pacientes con parálisis facial se recuperan 100% sin tener efectos secundarios. Pese a lo anterior, esto no siempre es así.
Consideremos ahora, ¿Qué es una parálisis facial?
Parálisis facial
La parálisis facial es un trastorno neuromuscular causado por una lesión en las vías motora y sensorial del nervio facial. Esto produce una alteración del movimiento en los músculos del rostro, en la secreción de saliva, lágrimas y en el sentido del gusto.
Síntomas de la parálisis facial
Los síntomas de la parálisis facial dependen del lugar donde se ocasionó la lesión del nervio facial.
Si la lesión es periférica, se puede presentar la pérdida del movimiento del lado afectado de la cara.
- Los pliegues y arrugas de la cara están ausentes o indefinidos.
- El párpado inferior, superior, las mejillas y las comisuras de la boca están caídas.
- Incremento en la sensibilidad a los cambios de temperatura.
- Mayor secreción de saliva y lágrimas.
- Problemas visuales como consecuencia del trastorno de movilidad: visión borrosa o incompleta.
- Dificultad para cerrar los ojos y pérdida del reflejo del parpadeo.
- Derrame de los líquidos ingeridos.
- Acumulación de los alimentos sólidos dentro de la encía y el maxilar.
- Mordida involuntaria en las paredes de las mejillas al masticar.
- Hipersensibilidad a los sonidos cotidianos, percibidos como insoportables, fuertes o dolorosos.
- Dolor de oídos.
- Pérdida del sabor en la mitad de la lengua.
La asimetría que ocasiona la parálisis es más visible cuando el paciente realiza los siguientes movimientos:
- Formar arrugas en la frente al elevar las cejas.
- Fruncir el entrecejo.
- Arrugar la nariz.
- Apretar los labios.
- También se puede observar asimetría al sonreír y al hablar, algunas veces la voz adquiere un tono nasal.
¿Cuáles son los efectos secundarios de la parálisis facial?
Definimos los efectos secundarios o secuelas de la parálisis facial como: Trastorno o lesión que queda tras la curación de una enfermedad o traumatismo y que es consecuencia de ellos, en otras palabras, son problemas que resultan de los efectos tardíos de una enfermedad determinada o de un traumatismo que no ocurre en la fase activa.
El 25% de los pacientes que han experimentado una parálisis facial muestra efectos secundarios severos debido a una mala evolución, degeneración incompleta o aberrante del nervio.
Dentro de algunos efectos secundarios encontramos:
Sincinesia:
Consiste en un movimiento muscular no intencionado de la boca. Aparece a los tres o cuatro meses después de iniciada la parálisis.
Espasmo post paralítico:
Es un trastorno motor que se manifiesta en contracciones de los músculos inervados por el nervio facial.
Síndrome mioclónico secundario:
Sacudidas involuntarias de un músculo o un grupo de músculos.
Lagrimeo:
El lagrimeo se debe a un exceso de producción de lágrima por irritación de la superficie ocular o a un defecto en la evacuación de esta.
Las secuelas de la parálisis facial aparecen meses después de presentada la enfermedad, se presenta con más frecuencia en los pacientes de edad avanzada y siempre se puede encontrar un tratamiento, aun cuando se llevan padeciendo los síntomas por un largo periodo de tiempo.
Conoce más sobre: Causas de la parálisis facial
Algunos datos de interés sobre la parálisis facial
- La rapidez de su aparición y evolución dependen de factores como el lugar de la lesión del nervio facial y de las causas que derivan el trastorno.
- La evolución clínica es diferente para cada paciente.
- Tiene un inicio repentino, dado que la mayoría de los pacientes se percatan de sus síntomas al despertar, se presume que empieza mientras el paciente está dormido.
- Puede ser precedida por situaciones de estrés o ansiedad.
Para cerrar, cuando una persona sufre parálisis facial, es muy frecuente que escuche consejos sobre lo que debe hacer para recuperar la movilidad de la cara, en todos los casos es indispensable visitar al médico y ponerse a disposición del tratamiento indicado por este. Es importante tener en cuenta que se debe procurar que los movimientos sean lentos, evitando mover muchos músculos a la vez, esto nos evitará que el nervio facial empiece a funcionar de manera incorrecta, generando un daño crónico y dificultando una óptima recuperación.